martes, 23 de octubre de 2007

Teoría - Práctica, dificil dualismo.

En artículos anteriores he tratado sobre la importante evolución que ha sufrido la estadística en materia de investigaciones científicas en las últimas décadas y el reciente desarrollo en el ámbito de su didáctica, siendo esta última generada, principalmente, por la demanda que exige el sector educacional. Diversos estudios sobre la comprensión de la estadística y las experiencias personales que poseemos los estudiantes a lo largo de nuestro proceso de enseñanza confirman la dificultad que presenta esta área, pudiendo señalar varias causas. En esta ocasión me referiré a una que, a mi parecer, es la que desenlaza todas las posibles causas conocidas hasta el momento.
La estadística en sí es una de las áreas de estudio más nuevas, por lo tanto la didáctica de la estadística es más reciente aún, lo que significa que los encargados de transmitir los conocimientos no poseen la preparación adecuada, incluyendo a los profesores, en cuanto a usar metodologías eficientes que muchas veces en el intento de enlazar la teoría con el ámbito procedimental producen confusiones que los docentes no son capaces de detectar ni de remediar. Si bien es cierto, que es el estudiante quien debe construir su conocimiento es labor de todos profesores que mediaron el aprendizaje a través de los procesos cognitivos de los educandos en los diferentes niveles velar por esa meta, entonces son los responsables directos de las dificultades que este posea, como el mal manejo de conceptos que produce futuros obstáculos en la adquisición de nuevos conocimientos y la carencia de capacidad de generalizar estos conceptos e ideas que limitan el proceso de enseñanza – aprendizaje al ámbito conceptual, dejando a medias lo procedimental y sin mostrar importancia alguna por el manejo de la estadística en la vida real de los estudiantes.
En el debate sobre la estadística, ciencia o rama de las matemáticas, debemos converger en que es una disciplina que posee un amplio campo por descubrir, tanto científica como educacionalmente, y que además es al igual que la matemática, un área donde se pueden desarrollar ampliamente la inteligencia abstracta, al construir e interpretar gráficos, al comprender conceptos como aleatoriedad, dispersión, espacio muestral, nivel de significancia, entre otros, al entender cabalmente la importancia de una muestra representativa para inferir datos a la población donde pertenecen, etc. Entonces, en la medida que comprendamos nosotros como profesores lo que sucede al interior de la mente de cada uno de los estudiantes, desde lo que estos ya manejan hasta donde queremos que comprendan, y cómo lograremos los objetivos debe significar la causa de preocupación de todos los que utilizamos y generamos estadística.
"el factor más importante que influye en el aprendizaje es lo que el alumno ya sabe. Averígüese esto y enséñese consecuentemente" (Ausubel y Cols, 1983).